Periódico Canarias, Enero 1997

Sonia Santana, la voz que provoca el hechizo y la magia en “Zalakadula”

En Zalakadula, espectáculo musical que estos días se representará en el Teatro Peréz Galdós, la popular cantante Sonia Santana se entrega en un repertorio con mucha marcha, que ella interpreta moviéndose con frenesí. 

Su voz entra así en los acordes musicales de Walt Disney, aportando tintes evocadores que adoba con eficacia por medio de recursos jazzísticos. "Sin embargo, cada tema me sale de una diferente forma o estilo, porque las melodías son distintas", aclara la cantante. 

El resultado es potente y vistoso; "lúcido" - puntualiza Sonia -. "Y este año se ha duplicado la inversión, que ofrecerá al público un gran espectáculo de luz y sonido" - explica -, "un gran musical que ha contado con un gran elenco de intérpretes". 

Su forma de cantar no abunda ni se cultiva demasiado, y dentro del encuadre de la fantasía moderna, se agradece su presencia: buena modulación, facilidad para transitar todos los estilos y registros, timbre envolvente y buena estampa. 

Desde que abandonara la formación española Olé Olé, muy conocida hace unos años, ha llovido mucho, y ella sabe lo que hace y está muy hecha y preparada, dando con su voz juego y contrastes que permiten que cualquier tema musical de Zalakadula especule con el hechizo y la abstracción. 

A pesar de que Sonia asegura que "la calidad musical, arreglos y sonido son de gran novel en este montaje, algo que será más apreciado por los mayores que por los niños, quienes se detendrán más en los personajes y la diversión, que en el desfile por el escenario". 

La originalidad de la voz de esta cantante, mezzosoprano dramática, estriba, en cualquier caso, en la presentación de sus trabajos bajo una insólita capacidad para combinar al mismo tiempo magia con rigor, riesgo y brillantez.

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